miércoles, 18 de enero de 2012

universidad del futuro e-learning

http://intercambia.net/temas/index.php/academia-khan/

http://www.eduvlog.org/

universidad y futuro


El programa de la Universidad de la Singularidad está estructurado en alrededor de 10 áreas interdisciplinarias: estudios del futuro y prospectiva, derecho y ética, finanzas y emprendimiento, redes y sistemas de computación, biotecnología y bioinformática, nanotecnología, medicina y neurociencia, inteligencia artificial y robótica, energía y ecología, y finalmente espacio y ciencias físicas. Adicionalmente, los estudiantes deben hacer un trabajo en equipo cuyo objetivo es proponer programas para mejorar la vida de un millardo de personas en el plazo de 10 años. Las propuestas deben incluir tecnologías avanzadas para mejorar rápidamente la situación actual de la humanidad y elevar el nivel de vida del mayor número posible de personas en el corto plazo.

escritos sobre la universidad del futuro

http://jorgewerthein.blogspot.com/2011/07/la-universidad-del-futuro.html

http://www.elnuevodiario.com.ni/variedades/107992

http://www.unmsm.edu.pe/reforma/descargables/temasreflexion.pdf

http://librodenotas.com/laguillotinapiano/14611/la-universidad-del-futuro-y-las-humanidades-que-vendran

http://www.universidaddigital2010.es/portal/page/udf/inicio/publico/objetivos_publicos/Presentaci%F3n%20cap%EDtulo%201.pdf

http://asesoriapedagogica.ffyb.uba.ar/?q=p-buchbinder-universidad-pasado-presente-y-futuro

http://noticias.universia.es/en-portada/noticia/2012/01/03/902440/d-jose-ramon-busto-saiz-universidad-futuro-tiene-ser-mas-especializada-mas-autonoma-es-decir-mas-personalizada.html

http://www.palermo.edu/coleccion-educacion-superior/

http://www.eleazarnarvaez.com/2011/07/la-universidad-del-futuro.html

mas escritos de la universidad del futuro

2925
Subido por el 16/12/2009
Prototipo que refleja brevemente los resultdos del trabajo en el Workshop Universidad Expandida de diciembre 2009 en la UNIA Baeza.

El audio no es lo mejor... sacaremos una versión con audio mejorada.
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escritos de la universidad del futuro

http://www.roberto-acevedo.cl/curriculum-vitae/

http://www.oei.es/salactsi/sutzarocena00.htm

http://www.univnova.org/

http://www.encolombia.com/ventas/LibreriaDigital/DocenciaUniversitaria/DocenciaParaelDesarrollo.htm

http://www.laverdad.es/alicante/prensa/20070302/elche/nuevas-tecnologias-universidad-futuro_20070302.html

http://www.trimatica.cl/DOC%20TESIS/10.pdf

http://books.google.cl/books/about/La_universidad_del_futuro.html?hl=es&id=fSkSca8TwzMC&redir_esc=y

http://es.wikipedia.org/wiki/Universidad_de_Warwick

http://es.wikipedia.org/wiki/Russell_Group

http://www.russellgroup.ac.uk/our-universities/

http://youtu.be/U8H422pRJ3Q

ategoria | Educación, Reflexiones

La Universidad del futuro Parte I

La Universidad del futuro Parte I

Roberto Acevedo


I.-Palabras de Introducción:

Este escrito será distinto a los que he producido en los últimos años, esencialmente por cuanto el tiempo ha transcurrido rápidamente y este proceso no ha sido en vano. No he dejado de observar y analizar con mi círculo de amigos, el entorno intelectual en el cual nos estamos desenvolviendo en la actualidad.  A decir verdad, las Instituciones de Educación Superior «sin apellidos» deben analizar con prudencia, cautela y sabiduría, sus verdaderas fortalezas y debilidades para enfrentar exigencias del medio cada vez más rigurosas, las cuales comenzarán a tomar cuerpo en forma organizada. Este tema es central y todo indica que el tamaño y la influencia del Estado será cada vez menor. Se quiera o no, avanzamos hacia una sociedad tecnocratizada en la cual importará la producción de bienes y servicios de alta calidad, necesariamente acompañado de investigación de frontera con el sello distintivo de aplicabilidad a problemas globales.  Este cambio de paradigma será vital, al momento de elegir una nueva opción de continuidad en un modelo de sociedad cada vez más demandante y complejo. La búsqueda será el estado del arte en todas las áreas que son relevantes a la vida de los seres humanos. En esta línea de pensamiento, vemos como problemas discutidos hasta el cansancio, entre los cuales podemos mencionar, algunos los siguientes :prevención de riesgos, procesos industriales, economía «macro-economía y micro-economía», gestión y administración, desarrollo de técnicas y procedimientos en medicina de punta «accesible a la ciudadanía»,preservación de las fuentes de energías convencionales y no convencionales, recurso hídrico «escaso»,vivienda,transporte, etcétera dominarán la discusión y la oferta que deben realizar las Instituciones de Educación Superior del futuro. No es razonable el trabajar sólo en forma local y con una mirada de corto alcance. Los profesionales del futuro deberán estar capacitados para un cambio significativo en su relación con la sociedad y en particular con el sector productivo.  El alumno del futuro buscará insertarse en un círculo de creación, el cual le permita trabajar en forma dinámica y creativa.  Este cambio será radical, no existirá tiempo para discusiones estériles, por cuanto serán los propios privados y los gobiernos, los cuales deberán establecer una agenda robusta y creíble para nuestra sociedad.  No es posible desestimar el avance científico y tecnológico a nivel del orbe, en el diseño y materialización de las carreras del futuro.
En función de lo señalado, no es razonable desestimar los avances en las distintas áreas del saber, a menos que el deseo sea simplemente cambiar de rumbo. Es posible anticipar que , por ejemplo, la industria del «retail», experimentará cambios significativos, en particular por la volatilidad en los mercados como también por la falta de circulante, tema que será relevante en sociedades no organizadas, las cuales quedarán en el corto plazo, con escasez de los recursos naturales que hoy disponen como también con servicios poco atractivos para atraer nuevas inversiones.  Todo indica que ha llegado el momento de hacer bien las cosas y por lo tanto, es el momento en el cual se deben tomar las grandes decisiones y éstas deben ser coherentes con los cambios profundos y estructurales que deberá experimentar la educación en todos los niveles. De igual forma, el rol del Estado deberá ser más creativo y apuntar hacia la pro-actividad y no actuar en forma reactiva, toda vez que el diagnóstico es relativamente claro. De igual forma, el Sector Productivo deberá invertir en recurso humano e infraestructura, a cambio de paz social y desarrollo. Los buenos negocios no son una respuesta a una sociedad desorganizada, en la cual aparecen los falsos liderazgos, por el simple expediente que siempre será posible «convocar y aglutinar» a los más desposeídos y frustrados por incoherencias de los grupos organizados y que ostentan el poder administrativo.  Postulo que se debe aspirar al legítimo poder, el cual posea la legitimidad que la sociedad como un todo hará exigible. La legitimidad y la legalidad (L-L)deben ir de la mano, de modo de organizar los pueblos con un objetivo central, cual es la del progreso y bienestar.  Se requieren nuevos liderazgos, basados en la dupla (L-L) y, esto significará que muchos deberán dar un paso al lado y trabajar como todos nosotros, sin hacer de la política un medio de vida.

II.- Algunas Consideraciones:

A la fecha de este escrito, la economía abierta de mercado ha tomado el «poder económico y geopolítico» de las naciones y continentes con una estrategia claramente definida.  Tiempo a la fecha, el ex- presidente de los Estados Unidos, Señor George Busch, padre, a propósito del inicio de las acciones en el Medio Oriente, en particular en Irak apareció en televisión anunciado un cambio en el «orden mundial».
Tal vez, no fueron pocos los que sentimos que era un momento, el cual marcaba nítidamente un antes y un después.  Posiblemente, aparezcan personas que al leer este escrito argumenten un antes y un después distinto al señalado.  Este no es un tema de discusión para el suscrito, por cuanto no es posible aceptar imposiciones intelectuales, porque alguien desde un posición de poder transitorio así lo desea y/o exige. En una economía, como la esbozada en estas líneas, es conveniente cambiar paradigmas y lograr un alto nivel de educación, profesionalismo y capacidad de re-invención en conformidad con las reglas dinámicas de evolución del mega-mercado, en el cual todos, ricos y pobres estamos inmersos. Hemos observado como el peso político relativo de las Instituciones del Estado ha ido cambiando y las adhesiones a este modelo de conducción,se debilitan ante el nuevo paradigma de la legalidad y legitimidad (L-L). En este entorno, si focalizamos esta discusión al nuevo modelo de Universidad, nos damos cuenta que la plataforma educacional actual sufrirá cambios de envergadura. El camino correcto es la excelencia y esta debe responder a los estándares y patrones universalmente aceptados.  Al respecto, en mis clases de pensamiento crítico y/o de herramientas de investigación, aparece siempre un tema en extremo interesante y que dice relación con la necesidad imperiosa de leer, comprender y proyectar el contenido de los escritos.  De igual forma, resulta sorprendente, observar como los alumnos no siempre están en condiciones de responder razonablemente frente a interrogantes del día a día, de igual forma a la necesidad de conocerse a sí mismo y la forma óptima de interactuar con un entorno, el cual requerimos definirlo con precisión. Los que somos de edad más avanzada, disponemos de un mapa mental, relativamente estructurado, y una capacidad de discernir entre lo que vale la pena y lo que es irrelevante en nuestros procesos naturales.  A modo de ejemplo, el método científico proporciona «herramientas sólidas» hacia la construcción de «modelos», los cuales nos facilitan la vida y nos entregan una estrategia y metodología para avanzar y buscar el progreso, tanto material como espiritual. De igual forma, disponemos de una metodología que nos permite discriminar el material a leer y analizar con la máxima rigurosidad posible.
En el ámbito de las Ciencias y Tecnologías, disponemos de una valiosa metodología la cual se traduce en clasificaciones en áreas, disciplinas y sub-disciplinas de escritos de autores de diversos grados de creatividad y en algunos casos de genialidad.  Me refiero al Instituto para la Información Científica (ISI). A decir verdad, la información que este Instituto entrega es de alto valor, cuando se debe decidir del «mar de escritos» existentes, la mejor opción y las referencias relevantes para complementar la lectura. En ocasiones, al no disponer de estos criterios y de la guía necesaria, la búsqueda de un contenido específico podría ser homologada a la acción de «buscar una aguja en el pajar».  En general en artes, letras y humanidades, también existe una jerarquización de las obras; en consecuencia, es necesario desarrollar estas competencias y talentos de modo de nutrir nuestro «intelecto» con mapas mentales de alta exigencia y rigurosidad.  En este ámbito, no existe espacio alguno para superficialidades, las cuales solo desincentivan los procesos de enseñanza, aprendizaje y proyección (E-A-P).

III.- Palabras finales:

Como lo hemos señalado en esta breve introducción, la Universidad del futuro representará un cambio completo de paradigma, tanto para alumnos como profesores de alto rango de excelencia.  Los maestros deben hacer resurgir, una vez más, la verdadera Academia.  Esta Academia, debe ser «de libre acceso» a todos aquellos para los cuales el aprender y saber sea vital.  Esta Universidad debe disponer de los mejores talentos e infraestructura, todo lo cual permitirá alcanzar una calidad de vida alta para todos.  Al dibujar este escenario en nuestras mentes, estaremos en condiciones de alcanzar un estado de vida, en el cual seamos más justos y responsables con nuestros semejantes.  El llamado es, en consecuencia, a construir una sociedad mejor para todos sin excepción, con estricto apego a valores y principios consensuados, capaces de transportarnos a un modelo razonable de sociedad organizada.

la universidad del futuro

http://www.garito.it/saggi/06veracruz_sp.html

http://www.ueconverge.com/data/public/REFLEXIONES%20SOBRE%20LA%20UNIVERIDAD%20DEL%20FUTURO%20-%20POR%20EL%20PROF.%20A.%20PULIDO%20-%20UAM.pdf

http://www.roberto-acevedo.cl/2011/11/la-universidad-del-futuro-parte-i/

martes, 17 de enero de 2012

jamais cascio

http://www.facebook.com/pages/Jamais-Cascio/138494379513552?sk=wiki

http://en.wikipedia.org/wiki/Jamais_Cascio

http://spacecolonization.wikia.com/wiki/Video:Jamais_Cascio:_Tools_for_building_a_better_world

jamais cascio

http://openthefuture.com/
La universidad del futuro
Nuestro recetario inicial pide combinar adecuadamente la necesaria interdependencia entre universidad y sociedad

Josep M. Bricall
La universidad.jpg (8052 bytes)Como cualquier institución social, la universidad difícilmente puede concebirse al margen del res to de la sociedad. Si no son atendidas las demandas de la sociedad, la universidad arriesga su legitimación, así como la propia contribución financiera a su desenvolvimiento. Pero también, recíprocamente, la sociedad depende en sus ambiciones, en su eficacia y en la racionalidad de sus propias decisiones del grado de excelencia de sus centros de enseñanza superior y de investigación.
Con toda seguridad, las anteriores afirmaciones -a causa de su reitarada repetición- son absolutamente banales hasta el punto de despertar un interés superior cualquier afirmación que sostuviese exactamente lo contrario.
Los verdaderos problemas comienzan cuando intentamos concretar las consecuencias de este punto de vista en su aplicación a la realidad de nuestros días. Por ejemplo, en la actualidad una parte importante de nuestra organización social y económica ha adoptado el mercado como forma de regulación. No pretendo aquí establecer los límites y las ventajas de este tipo de organización de la vida social. Sin embargo, el mercado tiene un carácter disolvente de ciertas estructuras: las barreras, los privilegios, los monopolios -sólo los legales- y cualquier tipo de aislamiento pueden ser barridos satisfactoriamente cuando soplan los vientos de las relaciones de la competencia. Pero esta acción demoledora, como es automática, actúa de forma indiscriminada. La vinculación directa de las diferentes actividades sociales a su lógica destruye formas de integración y de cohesión de algunas de estas actividades que, mediante su coordinación, pueden proteger determinados intereses colectivos. Siguiendo con los ejemplos, la regulación efectuada por las autoridades locales para ordenar la vida urbana es un procedimiento para la defensa -al margen del mer-cado- de ciertos intereses colectivos, sin los cuales la calidad de vida de las ciudades empeoraría lamentablemente.
Ello quiere decir que las decisiones que conciernen a la vida universitaria no pueden ser dejadas a la improvisación y que es preciso organizar debidamente una institución que, como la universidad, responde a las necesidades de formación superior e investigación que requiere la sociedad. Si las actividades de formación y de investigación se relacionan con el mundo exterior únicamente a través de un sistema directo de demandas y de ofertas, se corre el riesgo de hacer quebrar un sistema que asegura la continuidad de futuras investigaciones y la formación de futuros profesionales dotados de una cierta capacidad de creatividad.
La aptitud para organizar el cambio implica decidir y decidir supone elegir de acuerdo con opciones estratégicas. A este efecto, la universidad ha de disponer de una cierta capacidad autorreguladora -la autonomía- y la Administración debe establecer de manera adecuada a nuestros tiempos los modos apropiados de conexión con el resto de las instituciones sociales -la política universitaria-. Naturalmente, ambas cuestiones son hasta cierto punto interdependientes, porque la autonomía universitaria nunca se confunde con la mera autogestión de los cuerpos universitarios y debe incorporar, en consecuencia, una representación de la sociedad. Querría, no obstante, referirme ahora a la política universitaria y singularmente a los límites imprecisos de actuación de las autoridades responsables.
Para ello debemos acudir a nuestro recetario inicial, que pide combinar adecuadamente la necesaria interdependencia entre universidad y sociedad, tal y como exigen en la actualidad los ciudadanos.
El carácter de la formación que se busca en las universidades es, de veinte años a esta parte, cualitativamente diverso del que se pedía hace poco más.
La formación superior exige ahora un grado importante de flexibilidad, la posibilidad de rectificar opciones tomadas en periodos anteriores, la capacidad de combinar los curricula, la adquisición de conocimientos de carácter general que doten a los estudiantes de la conveniente adaptación a los cambios constantes de la sociedad, el derecho a incorporar en cualquier momento los nuevos avances de la ciencia y de la técnica.
Asimismo, se reconoce que las aulas no son el único lugar de adquisición de los conocimientos técnicos y que una parte importante de los mismos puede obtenerse en los centros de trabajo. Unido ello a la preocupación actualmente existente por lograr un empleo adecuado, es comprensible el desarrollo cada vez más considerable del estudio a tiempo parcial e incluso la interrupción de los periodos de formación para regresar a ellos cuando lo requiera el trabajo realizado o lo permitan las condiciones de su ejercicio. Probablemente, alguno pueda pensar que, si ello es cierto, la evolución que parece tomar la vida universitaria puede alejarla completamente de la concepción tradicional que muchos guardan de su función. Probablemente sea cierto. Tan cierto como que la actividad de las universidades en estos dos últimos siglos poco, muy poco, tiene que ver con la universidad que inmediatamente le precedió.
La transnacionalización de la economía y, en particular, el resultado de la unión monetaria instaurada en Europa van a desencadenar un proceso de transformación en la especialización de las actividades productivas y cambios profundos en la localización de la industria y de los servicios. De esta manera, van a intensificarse los factores que inducen a la movilidad de los estudiantes y de los ciudadanos en general y, por tanto, la flexibilidad de estudios y de diplomas tomará una dimensión, cuando menos, continental.
Las universidades, por lo tanto, proceden a transformar sus estructuras, alteran sus actividades tradicionales y eligen campos específicos de especialización que contemplan las necesidades de una sociedad que desborda límites y fronteras tradicionales.
Pero hay más. Esta nueva realidad introduce nuevas confusiones e incertidumbres en la política universitaria. Limitaré mis observaciones a un aspecto muy particular, como es la acreditación universitaria.
La certificación que suponen los diplomas universitarios ha evolucionado significativamente en estas últimas décadas. Ha proliferado el número de diplomas y títulos representativos con respecto a los que eran tradicionales. Han aparecido los documentos acreditativos de nuevas especialidades y diplomas relativos a niveles diferentes de conocimientos. Y, lo que es más preocupante, ha aumentado el número de estudiantes que abandonan sus estudios sin alcanzar un reconocimiento académico en forma de diploma o certificado.
Los diplomas que acabo de citar representan todavía el modelo tradicional, que contempla idealmente estudios efectuados con plena dedicación por parte del estudiante y con un sistema de formación sucesivo, sin interrupción, que tiene como grado terminal el correspondiente al doctorado. Pero las circunstancias apuntan a situaciones más complejas. ¿Cómo organizar el sistema de titulaciones cuando los estudios no se efectúan de forma ininterrumpida o de forma sistemática, o cuando expresan combinaciones de itinerarios curriculares diversos? ¿Será posible acumular los conocimientos efectuados en distintas fases de la vida, incluso más allá de la vida activa?
La denominada globalización de la economía y de la sociedad,l a la que anteriormente nos hemos referido, da también al problema una dimensión continental. Por una parte, los estudios deberían establecer modos de correspondencia entre los distintos países y también deberían permitir su acumulación entre estudios recibidos en diversas instituciones de nacionalidad no común.
Los diplomas sufren, pues, una evolución significativa en todas partes, porque revelan los cambios cualitativos que imponen las nuevas circunstancias. Hace siglos se concibieron como el procedimiento de acreditación de los estados nacionales para garantizar, en el interior de sus fronteras, niveles adecuados de capacidad en la adquisición de conocimientos para el ejercicio de una profesión. Actualmente, el destino de los estudiantes es el empleo en organizaciones que trabajan para el mercado o en la Administración pública, en una Administración pública que difícilmente escapará a las exigencias de contención del gasto público.
Los diplomas, por lo tanto, pasan a ser documentos informativos de los conocimientos adquiridos en diferentes países e instituciones, donde son éstas las que garantizan el nivel y la calidad alcanzados.
Nuevas responsabilidades se agregan a los responsables de la política universitaria para que los estudios satisfagan las necesidades de los ciudadanos. Cualquier reforma las debe tener en cuenta. Como se lee en la declaración de la Sorbona del pasado 25 de mayo:
Aceptada la diversidad, el establecimiento de un espacio europeo abierto para la educación superior ofrece perspectivas muy positivas, pero exige un esfuerzo vigoroso para abolir fronteras y desarrollar un marco de enseñanza y de formación que favorezca la movilidad y acerque la cooperación. El reconocimiento internacional y la capacidad de atracción de nuestros sistemas dependen de su transparencia, tanto interior como exterior.